COMPROMISO
VALENTÍN FUSTER:
MI COMPROMISO
El futuro de nuestro mundo está en los corazones de nuestros niños
Únase a mí para mejorar la salud cardíaca mundial
Apreciado socio de Global Health Promotion:
Durante más de cuarenta años, he dedicado mis investigaciones y mi actividad en la atención clínica a la promoción de la salud cardíaca. Mi trabajo me ha llevado a comunidades de todo el mundo donde he trabajado estrechamente con niños y adultos, en clínicas y hospitales, así como en diversos programas y escuelas.
De Bogotá a Madrid, pasando por Kenia, a lo largo de Grenada, en el centro urbano de Harlem y por las calles de Cardona, he evaluado y atendido a distintos pacientes en diversas etapas de la vida y con diferentes estados de salud: algunos aquejados de enfermedades cardiovasculares que afrontan los retos del día a día para el control de su salud, y otros, todavía jóvenes —antes de que la enfermedad cardíaca les llegue sin darse cuenta—, etapa en la que, como seres humanos, somos más impresionables y en la que es más fácil establecer hábitos saludables para toda la vida.
Mi trabajo se fundamenta en la certeza de que la educación basada en la ciencia es, y debe seguir siendo, un componente clave de la promoción y la mejora de la salud. Creo firmemente que para promover la salud del corazón a nivel mundial, debemos comenzar humildemente dentro de nuestras comunidades y, si funciona, seguir con la difusión.
A través de toda mi investigación, cada vez parece más claro que, para eliminar las enfermedades cardiovasculares y provocar un verdadero cambio generalizado a largo plazo, se requiere una transformación. Para erradicar las cardiopatías podríamos comenzar por la implementación de una educación temprana sobre la salud, basada en la ciencia, en niños de 3 a 5 años de edad.
El objetivo de mis descubrimientos es que los gobiernos de todo el mundo adopten esta visión de la educación y la promoción de la salud para que cada comunidad pueda experimentar los beneficios que puede tener una educación basada en la ciencia para la salud.
Únase a mis esfuerzos por mejorar los programas de educación temprana sobre la salud para que nuestros niños puedan vivir en un mundo libre de cardiopatías. Firme el compromiso adjunto si desea formar parte de estos esfuerzos.
Valentín Fuster, MD, PhD
Director, Mount Sinai Hear
Hospital Monte Sinaí
- Creo que todos los seres humanos estamos en riesgo de desarrollar una cardiopatía.
- Creo que la sociedad actual se cree invulnerable a las enfermedades cardiovasculares.
- Creo que, pese a los avances y a los miles de millones de dólares invertidos en la atención sanitaria, la enfermedad cardiovascular sigue en aumento debido a una educación incompleta y a unos malos hábitos sanitarios arraigados.
- Creo que la investigación científica y médica debe inspirar la creación de herramientas educativas que hagan más accesible la información para reducir las cardiopatías a escala mundial.
- Creo que cambiar hábitos de nuestro estilo de vida es la única forma de evitar la propagación de la enfermedad cardiovascular.
- Creo que nuestra mejor oportunidad para cambiar los hábitos de la población y detener esta tendencia está en los niños y en sus familias.
- Creo que es posible reducir las cardiopatías mediante una educación sanitaria temprana entre niños de 3 a 5 años para conseguir unos hábitos saludables y una mejora de la calidad de vida.
- Creo que la promoción de la salud mundial debe abordarse de manera positiva a través de una educación sanitaria temprana y recurrente, la introducción de nuevas herramientas educativas y una mayor concienciación de la sociedad en cuanto al desarrollo de la cardiopatía.